Ingredientes:
Calabacines.
Tomates.
Zumo de limón.
Aceite de oliva virgen.
Aceto balsámico
Sal, pimienta, ajo y albahaca.
Cortar el calabacín a láminas muy finas. Rociarlo con el zumo de uno o dos limones, y reservarlo en la nevera unas dos horas con ajo picado, al gusto. Para servirlo, cortar el tomate a láminas, también muy finas, y disponerlas encima de las láminas de calabacín, rociar con el aceite de oliva, unas gotas de aceto balsámico, la sal, pimienta y albahaca.
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