Con el tratamiento de los hilos tensores buscamos la suspensión o remodelación de las diferentes estructuras del rostro y/o cuello, mediante la colocación de unos hilos de sutura con espículas o conos de distinta longitud. Gracias a la colocación de los hilos conseguimos una estimulación natural de los tejidos y obteniendo como resultado un efecto lifting.
El resultado se puede apreciar de manera inmediata una vez terminado el procedimiento. Aunque es a partir del tercer mes cuando se observan los primeros resultados de la estimulación, y que continuaran de forma progresiva.
No requiere cuidados específicos previos, solamente la aplicación de crema anestésica antes de la colocación de los hilos, para minimizar las molestias en el paciente. Por indicación médica se podrá prescribir algún antibiótico preventivo.
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