Arrugas faciales

¿Qué factores provocan las arrugas faciales?

Son muy diversos, los más importantes son: Genética, edad, tabaco y sol.

El efecto de la edad provoca, entre otros: Desplazamiento de la grasa profunda de la cara de arriba hacia abajo, originando arrugas o surcos gravitatorios del lagrimal, nasogenianos y las líneas de marioneta; Pérdida de la elasticidad de la piel, por deterioro del colágeno, originando las arrugas enrejadas de la mejilla; y, por último, los músculos faciales están insertados en la piel, tras años de expresiones faciales que pliegan la piel, acaban quedando marcadas, primero solo durante el movimiento y finalmente en reposo, son las llamadas arrugas de expresión: Patas de gallo, ceño y código de barras (labio superior).

¿Qué puedes hacer en cada caso?  (¿se puede prevenir? ¿se pueden tratar?)  y Ejericios faciales o hábitos que ayuden a prevenir las arrugas.

Hay un factor genético inevitable, pero hay muchos hábitos que podemos mejorar:

– Mantener el peso estable previene las arrugas gravitatorias

– Una alimentación rica en agua, vitaminas y proteínas junto con buenos hábitos de sueño, mejoran la elasticidad de la misma desde el interior

– El uso adecuado de cosméticos que mantengan la piel bien hidratada y nutrida conseguirán el mismo efecto desde el exterior

– Evitar el tabaco que impide que la piel se alimente y oxigene correctamente, lo que provoca el estrechamiento de los vasos sanguíneos

– Evitar el sol mediante una protección adecuada y no tomarlo en el las horas centrales

– El uso de gafas de sol previene las arrugas del ceño

– La única controversia es con las patas de gallo: Se acentúan cuando reímos, pero la risa tiene un gran efecto beneficioso sobre la oxigenación y nutrición del resto de la piel, además de sobre todo el organismo

Cuando aparezcan, visitar a un medico estético que le indicará cuál es el mejor tratamiento y prevención para su caso.

Los tratamientos preventivos actuales son muchos, variados y adaptados a cada situación personal. La revitalización facial con plasma autólogo o con infiltración de nutrientes, como vitaminas o aminoácidos. También los inductores de colágeno como la radiofrecuencia o los láseres no ablativos.

Si ya han aparecido la arrugas, los tratamientos actuales tienen la tendencia a suavizarlas manteniendo un aspecto natural y saludable. El uso de láseres ablativos pero fraccionados, los compuestos de ácido hialuronico, las nuevas tendencias mediante neuromoduladores constituyen todo un potencial de posibilidades de mantener un aspecto saludable y natural, huyendo de estridencias y falsas expectativas.